Torta del Casar

Torta del Casar

Hablamos de un queso excepcional, ubicado en el ranking de los mejores quesos del país.  Una La historia le otorga un plus, ya en la edad media,  la zona productora actual de este queso, era de transumancia y pastoreo. Un privilegio real del Rey Sancho VI al Casar para el pastoreo libre del ganado. En esta época, este queso llegó a ser mofo de pago.

Delicado dada sus características de elaboración y componentes, la Torta del Casar se produce a partir de leche cruda de ovejas entrefinas y merinas. El producto final es un queso de forma cilíndrica muy cremoso, de color amarillo y sabor intenso, poco salado y un punto amargo.

El cuajo usado en este caso de la Yerba Cuajo que se extrae de la flor de cardo entre 28ºC y 32ºC y durante un tiempo de entre cincuenta y ochenta minutos lo que hace que su interior sea una crema casi líquida (¨dependiendo de la temperatura externa). Después de cuajar la leche, se corta hasta tener granos finos, luego se introduce en moldes pequeños y se prensa durante tres-ocho horas. El periodo de maduración está en torno a los sesenta días.

La torta del casar es una de las denominaciones de origen protegida más conocida de Extremadura. Se produce en diversos municipios cacereños (un total de treinta y seis además del casar de Cáceres, Montánchez, Sierra de Fuentes o Llano de Cáceres entre otros).

La mejor forma de comer la Torta, se corta la parte superior (que luego puede servir de tapa en el caso de no consumirla de una sola vez) y se unta en pan. Es preferible no consumirla fría, por ello es recomendable sacarla un rato antes del frigorífico y bien si las condiciones metereológica lo permite, en una despensa.

Recomendable como aperitivo o postre. Es conocido el uso de este queso en restaurantes tan relevantes como el Atrio de Cáceres. Su chef, Toño Pérez elabora diversos platos con esta joya gastronómica.